lunes, 18 de mayo de 2009

Corbatas y cachabas

- ¿Qué pasa?
- Todo está podrido en este mundo.
- ¿Por qué lo dices?
- Mira a tu alrededor.
- Mmm sí, ¿qué?
- ¿Qué has visto?
- Pues ahí está el parque, los edificios, un chaval que se ha caído, la iglesia, los semáforos...
- ¿Y qué más?
- Uf pues... allá hay un colegio también y las madres, la fuente, los contenedores...
- Joder, entonces nó has visto nada.
- A ver, ya vale, ¿de qué chorra hablas?
- Yo he visto la avaricia en las corbatas, la soledad en las cachabas, el placer en la sangre violenta, la infelicidad en los bolsos con ofertas del súper, el nerviosismo en los coches apresurados, la maldad en las sotanas...
- Ah, ya. Sé de lo que hablas.
- ¿Y qué hacemos, tío?
- Nó sé, nó tengo ni idea. Pero conozco a gente que ha dejado de ver todo eso, y ahora son corbatas, cachabas, sangre, bolsos, coches, sotanas...